Sri Sarada Devi



Sri Sarada Devi (1853-1920). Personificación viviente de la Madre Divina misma, la Creadora y Controladora  del Universo, la infinita y todo abarcante energía Primordial.

Consorte Espiritual de Sri Ramakrishna, representa el otro aspecto del poder Divino expresado en los valores de las cualidades femeninas. Madre espiritual de la orden, monja y maestra formadora de innumerables monjes, incansable guía y dadora de luz para todos aquellos que se consideren sus hijos. Es y seguirá siendo junto a Sri Ramakrishna  el ejemplo de una vida de entrega a Dios. Ella demostró que es posible manifestar la Divinidad en y a través de la vida diaria. Su amor, su conocimiento, infinita compasión y simpatía para todos, la convierten en una imagen viviente de la Divina Maternidad. Ella, Sri Sarada Devi , es nuestra Madre.

La vida pura, fuerte, suave, inegoísta  y dedicada que llevó, como una verdadera y cariñosa madre, durante su existencia terrena, alentó a millares de hombres y mujeres de distintas religiones, y aún después de su desaparición física, esa su ilimitada, elevadora y misericordiosa fuerza, perceptiblemente, está despertando y elevando a todas las mujeres.



Hablando sobre ella dice Swami Vivekananda en una carta

"Hermano, tú no has comprendido aún el significado maravilloso de la vida de la Santa Madre; ninguno de vosotros lo ha comprendido. Pero, poco a poco, lo comprenderéis. Sin la Shakti (fuerza Divina) no hay posibilidad de renovación espiritual para el mundo.¿ Por qué nuestro país es el más pobre y más atrasado de todos los países? Porque la Shakti es tenida en menos aquí.

 La Madre ha nacido para revivir esta maravillosa Shakti en la India; y formando ella el núcleo, nuevamente nacerán en el mundo mujeres como Gargui y Maitrei (las cuales se mencionan en los Upanishads como realizadoras de lo Supremo). 

Sin la gracia de la Shakti nada puede llevarse a cabo. 

¿Qué encontré yo en América y Europa?. Adoración a la Shakti, adoración al poder. Pero allí, su adoración es hecha ignorántemente, buscando la gratificación de los sentidos. 

Imagínate, entonces, ¡ cuán grande bien lograrán los que la adoren con toda pureza, considerándola como su propia madre!. Cada día voy comprendiendo las cosas con mayor claridad, voy percibiendo más y más la naturaleza íntima de todo".

No hay comentarios:

Publicar un comentario